Estoy en una espiral de sensaciones nuevas para mí,
aprendiendo y empapándome de todo lo que me va enseñando el Mister. La verdad
es que me da un poco la impresión de que tenía una venda en los ojos, siempre
que buscas información sobre entrenamientos (os recuerdo que soy bastante
novato) aparecen planes por objetivo. Ahora mismo no hay más objetivo a
la vista que el de hacer una buena temporada de triatlón, la clásica temporada
de Sprint y Olímpico, esta última distancia me parece una pasada. Por encima de
esto hay una orientación primordial que es la de formarme como atleta, con todo
lo que eso significa. No hay un objetivo a la vista, no estamos entrenando
persiguiendo un maratón o una marca concreta. La metamorfosis que he sufrido
estos meses está siendo increíble, por primera vez en mi vida me empiezo a
notar fuerte. En la Carrera del CSIC batí mi marca de 10K sin prepararlo
específicamente, adelantando gente de principio a fin. En Somosierra bajé de 3
horas en una semana cargada de entrenamiento donde llegaba algo machacado a la
prueba, ahora he terminado La Adrada en 2:17 viéndome más fuerte que hace unas
semanas.
Que estoy muy contento es algo más que evidente, que lo
mejor está por llegar también, que hay que seguir trabajando duro es obvio. Los
que hemos llegado tarde a esto tenemos carencias, también las puede tener quien
ha hecho cosas pero no ha seguido un entrenamiento estructurado. Lo que yo noto
es que según voy entrenando aquellas facetas en las que peor estoy, no solo voy
bajando tiempos sino que mis sensaciones son cada vez más increíbles y
curiosamente, el cuerpo no me pide aumentar distancias sino lanzarme a por
pruebas más cortas y explosivas. Más calidad y menos cantidad.
Fotografía robada a mi amigo Rafa ;)
Cuanta razón...lo malo es que a veces nos pierde el ansia por el resultado, lo queremos todo y lo queremos ya, pero donde va a parar... Estas fuerte macho, que el tema da resultado no cabe duda
ResponderEliminar